Sobran palabras, faltan momentos

Quiero gritarte en silencio
que sobran palabras,
que faltan momentos,
que vengo a buscarte
y que nunca te encuentro,
que busco una paz negociada
con mis sentimientos.

Sobran palabras y faltan momentos.

Son tiempos de discursos vacíos, de palabras huecas que no dicen nada. De parejas que cenan a la luz de una vela mientras consultan el móvil. De turistas que nunca supieron ser viajeros. De gente que fotografía pero no mira, como si fuesen francotiradores impacientes acuciados por un reloj invisible.

Son tiempos de ruido de claxon aullando en la mañana. De mensajes de móvil que no cesan en la madrugada. De gente que choca con otra gente en la Gran Vía. De padres que no dan a sus hijos más que regalos. De ladrones de tiempo acechando tras cada esquina. De bocetos inacabados. De gente que grita en silencio sin que nadie la escuche. De gente que muere sin encontrar el momento ni las palabras para despedirse.

Sentarnos en la terraza un atardecer cualquiera, sin motivo. Mirarnos a los ojos diciéndolo todo sin hablar. Brindar con una buena cerveza. Decir adiós, te quiero, te echaré de menos, te acuerdas de aquel día y tantas cosas más.

Son tiempos sin tiempo. Donde sobran las palabras y faltan los momentos. Donde nos gritamos en silencio. Donde nos buscamos sin encontrarnos.